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EL ELIXIR DE LA ETERNA JUVENTUD VERDADERAMENTE EXISTE.

Recientemente investigadores de la Universidad de Oviedo España secuenciaron el genoma de la Turritopsis dohrnii con la esperanza de encontrar los genes que conducen a la inmortalidad biológica que posee esta Anémona; ellos consideran que logra vivir tanto tiempo por su capacidad de convertirse en pólipo (una forma joven de la misma) mediante la transdiferenciación (el cambio mediante el encendido de ciertos genes en otra estirpe celular).

Sin embargo, el doctor y científico mexicano Gerardo Martín Gonzalez López quien descubrió la Terapia de Regeneración Celular a Base de Inductores y quien también descubrió el Sistema Regenerativo del cuerpo humano considera que las células madre no solamente regeneran su nicho celular en el propio cuerpo humano y en está milagrosa anémona también controlan la identidad de las células diferenciadas es decir de las células hijas.

El doctor Gerardo estima que la Turritopsis puede rejuvenecer y ser tan longeva porque tiene más células madre en proporción que los humanos (que tenemos 1 célula madre por cada 100,000 células diferenciadas o hijas), el científico mexicano opina que a diferencia de muchas especies la Turritopsis tiene aproximadamente 1 célula madre por cada 1000 células diferenciadas o hijas y esto le confiere la capacidad de que estas células madre puedan realizar migraciones celulares regenerativas, regenerando los tejidos dañados y por ende rejuvenecerlos.

Lo anterior mencionado es lo que produce su llamada inmortalidad y no por medio de transdiferenciación o metaplasia que como en esófago de Barrett puede conducir a la transdiferenciación de células epiteliales en el esófago a células secretoras caliciformes que luego se transforman en un carcinoma.

Por tanto, el número de células madre es determinante para la juventud y la longevidad de la anémona inmortal.

Así pues con la nueva generación de la Terapia de Regeneración Celular a Base de Inductores se puede estimular a las células madre dentro de sus nichos en el propio cuerpo humano y al incrementar el número de ellas dios nos concede más capacidad de regenerar tejidos , aparatos y sistemas del cuerpo humano acercándonos a lo que sucede con la Turritopsis dohrnii un verdadero milagro y una segunda oportunidad que nos da nuestro creador para enfrentar enfermedades como las llamadas incurables; diabetes, hipertensión y hasta el cáncer.

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