“Mi diagnóstico fue linfoma hodgkin en estadio cuatro con filtración renal, mis síntomas eran mareos, dolor de cabeza, desmayos, fiebres altas…”, son las palabras de un joven a dar su testimonio al recibir la Terapia de Regeneracion Celular a Base de Inductores.
Y es que después de recibir el tratamiento y realizar los estudios comparativos encontraron que la enfermedad del joven paciente está disminuyendo y con ello su calidad de vida está mejorando también, es por ello que decidió, junto con su familia, dar este testimonio para que quienes padezcan está enfermedad sepan y conozcan que hay una terapia que si puede ayudar a mejorar.
Al hacer el uso de la palabra el coronel médico cirujano Gerardo Martín González López explicó a los presentes que para reconocer cuando se trata de un linfoma hodgkin o linfoma No hodgkin se analizan y se analizan pruebas en el microscopio y la diferencia radica en que un linfoma hodgkin tiene unas células que parecen ojos de búho llamadas células de Reed-Sternberg, mientras que el linfoma No hodgkin no las presenta.
Explicó también que a pesar de que los dos son enfermedades malignas “el linfoma No hodgkin es más agresivo, son pacientes que tienen cambios severos muy rápido, los linfomas y las leucemias son primos hermanos, hacen crecer el hígado, el vaso sanguíneo, se destruyen mucho las plaquetas y los glóbulos rojos, llegan los sangrados y eso es lo que los debilita”.
En este sentido se dio a conocer que recientemente salieron los estudios de laboratorio del paciente que señalan que los gangueos medibles disminuyeron 16%.
“Un 16%, y eso no lo ve nadie, que la carga tumoral disminuya esa cantidad, pero véanle la coloración, siempre las personas que tienen leucemia o linfoma se ven amarillos, delgados, mareados, en general con un grado de daño muy grande y eso es lo que termina afectando”.
Pero, por el contrario, señala el coronel del Ejercito Mexicano, “si tiene la hemoglobina bien, las plaquetas bien y está disminuyendo la carga tumoral, cuál es la respuesta: que Dios está haciendo el milagro.
Es algo muy bonito, pero hay que dimensionarlo, un linfoma de esos se lleva muy rápido a un joven, pero no solo no se lo está llevando, sino que está mejorando”.
Finalmente, el descubridor de esta Terapia de Regeneración a Base de Inductores recordó que está terapia no es la cura del cáncer, pero lo que hace está terapia es contener a la enfermedad y en ocasiones puede llevar a la remisión como en este caso.
“Este joven es uno de los ejemplos de que con esta terapia se puede llegar a la remisión. Pero hay que recordar que remisión no es lo mismo que cura, pero si ya hay remisión y Dios lo deja así por treinta o cuarenta años con eso es suficiente”, finalizó González López.